domingo, 27 de febrero de 2011

Con ganas de buscar la ciudad de oro.


En la foto - la madre de mi hija.














Como podéis ver, mi hija es la chica mas guapa del mundo! Desgraciadamente no solo yo pienso así. ¡Hay hombres asquerosos que se atreven a acercarse a ella! ¡Que malditos son! Tontos! ¡No saben que no durará mucho tiempo y ellos estarán debajo de la tierra! ¡Mi Ángel tiene que estar limpio como una lágrima! (jeje, que buen poeta soy). Que pena que su madre ya se haya muerto – era una mujer guapísima y nunca se oponía por las noches... Aj, que bueno que aquí también haya algunas mujeres guapas – aparte de eso me aburre la vida aquí. Una de las desventajas es que esas chicas no tienen tantas ganas como antes. Pero ya saben que cuando yo quiero algo, nadie debería resistirse.

Echo de menos las guerras! Gracias a dioses que he oído hablar sobre El Dorado. Desde aquel momento sueño cada día sobre el oro y las riquezas que están en la selva... Cuándo este maldito Pedro empezará el viaje para llegar allí, no sé.. Pero espero que muy pronto. Lamento que no sepa la selva y no tenga ninguna idea adónde ir. Os juro por dioses peruanos que mis compañeros y Ursúa no conseguirán ver la ciudad de oro! Cuando llegue a Eldorado me convertiré al rey de la ciudad y viviré como un gran señor! Si no me creeis, ¡esperad un poco de tiempo y convenceréis, jaja!


Autor: Joanna

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