domingo, 27 de febrero de 2011

Tanto ha cambiado. . .

¡Por fin! ¡Por fin! Escribo después de un “periodo vacío” de mi vida. Vacío para mí, porque no hubo ningún progreso en lo que es más importante, en lo que es mi destino. Pero tampoco es que no hubiera ningunos momentos buenos en aquel tiempo. Una mujer dió a luz a mi hija. La llamamos Flores:) Hubo tambien unos problemas politicos, pero hoy no voy a contar nada de ese tema.

Chiquitilla ya tiene quince años. Es tan guapa.. Parece mucho a su padre:) Tengo a alguien que me podrá apoyar en mi camino. Le ayudaré convertirse en la más rica mujer en este mundo. Ella será mi reina.
Trabajando en la caballeriza conocí mucha gente peruana… Oh, Dios, ¡que historias me contaron! Todo sobre su cultura, sobre el principio del mundo según sus creencias(jajaja... que gracioso! sus dioses y todo eso.. ellos viven en las nubes! jajaja...) y también sobre El Dorado. Dijeron que era una ciudad muy grande ¡y toda construida de oro! ¡No puedo parar de pensar en todo lo que esté escondido quiza muy cerca de mi! (se dice que la ciudad será en el norte) Cada noche sueño con mi futuro cubierto con tanto oro.


Ya os digo porque decidí escribiros. Hace unos días, cuando estaba en el centro de la ciudad de Quito(llevo viviendo aqui un par de años), un amigo mío me informó que había oído hablar sobre un viaje mandado por Pedro de Ursúa. El va a formar un grupo de personas valientes que quieran ir a buscar El Dorado. Jajaja…Esa información me vino de perlas:) Claro que nos apuntamos con mi hija.


Os pongo una foto de mi hija.

Autor: María

No hay comentarios:

Publicar un comentario